Tartaletas de queso y arándanos

Yo creo que quien ya nos conozca sabe que somos mega fans del queso en todas sus variantes, costumbres y lenguas 😉 Si la semana pasada hicimos un flan de queso sin horno con peras en almíbar especiadas, esta semana os traemos otra receta compartiendo ingrediente principal… el queso!

En casa solemos hacer tartas de queso cuando nos reunimos y la verdad siempre probamos diferentes maneras de hacerla, variando cantidades o añadiendo ingredientes diferentes. Esta receta en concreto es una de nuestras favoritas, podríamos ser algo radicales y decir que es la receta definitiva de tarta de queso. No sólo tiene intenso sabor a queso, sino que su textura es impresionante, es el sumun de las tartas de queso ya que queda macro esponjosa.

Es importante deciros que nosotras solemos preparar la cantidad que ponemos en «ingredientes» para una tarta grande, usando un molde alto con diámetro de 28 cm. Si vais a preparar tartaletas debéis dividir la masa a razón de las cantidades que queráis preparar. Nosotras solemos dividir las cantidades en 3 partes y así nos saldrán en torno a 12 tartaletas. También podéis usar un molde de 26 cm y hacer aún así 6 tartaletas. Eso ya es a vuestro gusto, lo que si es seguro es que os saldrá riquísima!

Tartaletas de queso y arándanos

Preparación: 60′
Raciones: 1 tarta para 8 o 12 tartaletas individuales
Dificultad: media

Ingredientes

Para la tarta de queso:

  • 900 gr de queso blanco cremoso de untar
  • 130 gr de azúcar
  • 200 ml de nata líquida
  • 5 huevos L o 4 XL
  • el zumo de 1/2 limón
  • una cucharada de esencia de vainilla
  • 2 cucharadas colmadas de harina de trigo
  • 2 puñados de arándanos frescos
  • mermelada de arándanos

Para la base:

  • 250 gr de galletas tipo maría
  • 160 gr de mantequilla

Receta

Precalienta el horno a 200ºC.

Comencemos preparando la base, para ello derretir la mantequilla en el microhondas durante un minuto. Mientras tanto triturar las galletas, dejarlas lo más finas que podais, nosotras la hemos trabajado con un procesador de alimentos. Una vez ya trituradas añadirle la mantequilla y mezclar bien para que se quede homogeneo. Ahora si, cubre la base de tu tarta grande o la base y los laterales de tus tartaletas. Una vez que esté cubierto apreta la base con el culo de un vaso, mete en la nevera mientras preparamos el relleno.

En un bol amplio o en un procesador de alimentos poner el queso blanco junto con el azúcar, una vez que esté integrado añadir la harina, la esencia de vainilla y el zumo de limón. Volvemos a batir, cuando esté la mezcla homogenea añadir los huevos de uno en uno. Es decir no añadiremos el siguiente hasta que el anterior no esté totalmente integrado. Por último añade la nata y vuelve a batir, este paso está bien que lo hagamos con una velocidad alta para que nuestra mezcla tenga aire y por ello salga mas esponjosa.

Vuelca la masa en el molde o en los moldes que hayas elegido, dispersa 5 cucharadas de mermelada de arándanos sobre la mezcla de queso. Si vas a hacer las tartaletas es suficiente con una cucharadita colmada de mermelada por unidad. Con la ayuda de la punta de un cuchillo dispersa y abre la cucharada mezclandola ligeramente con el queso. Ahora dispersa los arándanos frescos sobre el queso, y listo!

Al horno durante 40 o 50 minutos a 200ºC si hemos hecho una tarta grande o tan sólo durante 30 minutos si estamos haciendo tartaletas. Cuando termine el tiempo de horneado y este cocinada la dejaremos dentro del horno apagado durante 15 minutos más, para que repose. ¡Y listo! Para decorar le hemos puesto en la superficie un poquito de queso crema bien batido con azúcar, junto con una cucharada de mermelada y un puñadito de arándanos 😉

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