De pequeñas nuestra madre nos preparaba este pastel de tortillas en muchas ocasiones. Nos encantaba la verdad, y es que nunca era igual. Si las tortillas son versátiles porque las podemos hacer de lo que se nos ocurra, que me decís si las combinamos y el resultado es un pastel de tortillas como este? Los ingredientes que hemos usado son los que comúnmente usamos nosotras para hacer tortillas, pero siguiendo esta idea dejad volar vuestra imaginación y haced las tortillas que más gusten en casa consiguiendo una combinación deliciosa.

Para hacer un pastel de tortillas se nos ocurren muchas ideas, una de queso, de york-queso, de calabacín, de cebolla, salchichas… Como la haríais vosotros? Eso si, el añadir salsa bechamel y queso es casi obligatorio, le aporta jugosidad a nuestro pastel, por no hablar de lo que nos gusta un gratinado 😉

Otra opción es poner entre tortilla y tortilla un poco de tomate frito, en ocasiones lo hemos hecho y nos encanta, pero esta vez hemos optado por poner sólo salsa bechamel.

Ahora si, ¿nos ponemos a cocinar?

 Pastel de tortillas

⌇ Preparación: 1h
◷  Raciones: 3
⥯  Dificultad: media

Ingredientes

• 3 patatas
• 1/2 cebolla
• 4 champiñones
• 3 puñados de espinacas
• 2 latas de atún en aceite
• 8 huevos
• 1 cucharada colmada de harina
• 150 ml de leche entera
• aceite de oliva
• queso
• sal

Receta

Empezaremos con la tortilla de patata que es la que nos servirá de base. Cortamos tanto las patatas como la cebolla en rodajas finas y les ponemos sal. En una sartén con abundante aceite de oliva las freímos hasta que estén tiernas y doraditas.  Una vez listas les escurrimos el exceso de aceite.

Ahora en un bol amplio batimos 4 huevos con una pizca de sal. Añadimos las patatas con la cebolla fritas y mezclamos. Vertemos en una sartén antiadherente con un chorrete de aceite de oliva y dejamos que se cuaje por debajo, después le damos la vuelta y dejamos que cuaje por el otro lado. Que quede más o menos hecha dependerá de vuestros gustos.

Ya tenemos la base hecha, y la tortilla más «laboriosa» por decirlo de alguna manera, así que pasamos a preparar la salsa bechamel. En un cazo ponemos 2 cucharadas de aceite y la harina, con una cuchara removemos para que la harina se disuelva y dejamos cocinar la harina unos minutos a fuego lento y sin parar de remover. Después vertemos la leche poco a poco y sin dejar de remover para que no nos salgan grumos. Añadimos un poco de sal y dejamos que se cocine un poco más. Ya la tenemos lista, apartamos.

Bien, ya que tenemos la bechamel vamos a seguir con el resto de las tortillas. Vamos a hacer la tortilla de champiñones. Cortamos los champiñones limpios en trocitos pequeños y los rehogamos en la sartén con aceite de oliva y sal. Dejamos que se cocinen y pierdan todo el agua. Cuando estén listos los mezclamos con 1 huevo y procedemos a hacer la tortilla.

Sobre la tortilla de patata ponemos un par de cucharadas de bechamel y colocamos encima la tortilla de champis. Haremos esto siempre entre tortilla y tortilla.

Seguimos con la tortilla de espinacas. En la sartén ponemos los 3 puñados de espinacas con un hilo de aceite de oliva, esperamos a que mengüen y pierdan todo el agua. Al acabar mezclamos con el huevo y hacemos la tortilla. La ponemos sobre la de champis.

Por último hacemos la tortilla de atún con 2 huevos y 2 latas de atún en aceite.

Al poner la última tortilla verteremos encima la salsa bechamel que nos quede y rallaremos un poco de queso. Llevamos el pastel de tortillas al horno a gratinar para que se funda y dore el queso.

Listo para servir con una buena ensalada.

A disfrutar!!

Sugerencias y consejos:

Excepto para la tortilla de patatas que hemos usado 4 huevos para el resto hemos puesto lo mínimo, 1 o 2 ya que la idea es que coman 3 personas, sí tocamos a casi 3 huevos cada uno. Usad los que queráis dependiendo de cuantos vayáis a comer y añadid más ingredientes y tortillas si queréis un pastel más grande. En ese caso doblad los ingredientes para hacer la salsa bechamel y que no os falte.

Podéis hacerla con tiempo, por la mañana, y a última hora cubrir con la bechamel y el queso para meter al horno, así gratinamos la superficie y de paso la calentamos por completo.